Comunicación constructiva en el matrimonio

LA COMUNICACIÓN CONSTRUCTIVA EN EL MATRIMONIO

Un matrimonio feliz depende de que el esposo y la esposa aúnen esfuerzos. Para descubrir y experimentar las inestimables alegrías de un buen matrimonio, es esencial la comunicación constructiva.

Qué entraña la comunicación constructiva

¿Qué entraña la comunicación constructiva? Se
definecomunicación como “transmisión o intercambio de ideas, opiniones

o información mediante el habla, la escritura o las señas”. Por tanto, implica dar a conocer sentimientos e ideas. Y para que sea constructiva, estos deben ser edificantes, reconfortantes, virtuosos, dignos de alabanza y consoladores (Efesios 4:29-32; Filipenses 4:8).

La confianza y la comprensión mutuas hacen posible la comunicación constructiva. Estas cualidades se obtienen cuando el matrimonio se considera una relación para toda la vida y existe el compromiso sincero de hacer que funcione. Joseph Addison, ensayista del siglo XVIII, escribió sobre esa relación: “Dos personas que se escogen la una a la otra de entre toda la familia humana, con el objeto de consolarse y atenderse mutuamente, se comprometen con esa acción a responder a las flaquezas y las perfecciones de su pareja con buen humor, afabilidad, discreción, perdón, paciencia y alegría, hasta el fin de sus días”. Qué feliz es una unión de ese tipo. Mediante la comunicación constructiva podemos adquirir esas preciosas cualidades, que adornarán nuestro matrimonio.

Estorbos para la comunicación constructiva

La mayoría de las parejas abordan el matrimonio con optimismo, hasta con euforia. Pero en el caso de muchas de ellas, la euforia desaparece enseguida y el optimismo se desvanece. La seguridad tal vez se vea

remplazada por una mezcla amarga de frustración, ira, hostilidad y hasta profunda antipatía. La convivencia marital se ve reducida entonces a una relación en la que no queda más que aguantar „hasta que la muerte los separe‟. Si se desea mejorar o conservar la comunicación constructiva necesaria para que exista un buen matrimonio, hay que eliminar determinados estorbos.

Un verdadero estorbo es el temor a la reacción del cónyuge a determinada información o deseo. Por ejemplo, alguien tal vez sienta miedo a ser rechazado tras enterarse de que va a acabar sufriendo una discapacidad grave. ¿Cómo se explica al cónyuge que el tratamiento al que se va a someter cambiará drásticamente su aspecto o su capacidad para valerse por sí mismo? En tales casos es más necesario que nunca comunicarse con franqueza y planificar con seriedad para el futuro. Asegurar de palabra a la otra persona que se la sigue amando, aunado a frecuentes muestras de ternura, comunicará un interés personal que contribuirá a conseguir que el matrimonio sea verdaderamente satisfactorio. En la vida de casados, este proverbio debería hallar su máxima expresión: “Un compañero verdadero ama en todo tiempo, y es

un hermano nacido para cuando hay angustia” (Proverbios 17:17).

Otro estorbo para la comunicación constructiva es el resentimiento. Se ha dicho con acierto que los matrimonios felices son la unión de dos personas que saben perdonar. A fin de encajar en esa descripción, los casados harán lo posible por seguir el práctico consejo del apóstol Pablo: “Que no se ponga el sol estando ustedes en estado provocado” (Efesios 4:26). Seguir este consejo y no alimentar la ira o el resentimiento exige, sin duda, comunicación humilde. En un buen matrimonio, los cónyuges no sucumben una y otra vez a la ira, las peleas y el rencor (Proverbios 30:33). Procuran imitar a Dios, quien no guarda resentimiento (Jeremías 3:12). De hecho, se perdonan de corazón (Mateo 18:35).

Un estorbo claro para todo tipo de comunicación es retirarse la palabra, lo cual implica, además de que uno de los cónyuges deje de hablar al otro, las expresiones taciturnas, los suspiros profundos y las acciones mecánicas. Quien actúa de ese modo está dando a entender que siente cierto desagrado. Pero hablar de los sentimientos personales de una manera franca y afable contribuye mucho más a mejorar el matrimonio que guardar silencio y estar malhumorado.

Prestar poca o ninguna atención cuando habla el cónyuge es otro

obstáculo que ha de superarse si se desea una buena comunicación en la intimidad del matrimonio. Tal vez estar cansados o atareados nos impida disponer de la energía mental y emocional que hace falta para escuchar con atención. Quizá se discuta sobre ciertos planes que para uno de los cónyuges se habían expuesto con claridad, mientras que para el otro es la primera vez que se habla de ellos. Obviamente, la mala comunicación es la causa de esas dificultades.

Cómo fomentar la comunicación constructiva

Es muy importante dedicar tiempo a la comunicación amorosa y constructiva. Hay quienes pasan muchas horas delante del televisor viendo la vida de otras personas y dejan muy poco tiempo para la suya. Por tanto, apagar el televisor suele ser una medida necesaria para conseguir una comunicación constructiva.

Apagar el televisor permite que haya más tiempo para comunicarse

Igual que hay un tiempo apropiado de hablar, lo hay de permanecer callado. Dijo el sabio: “Para todo hay un tiempo señalado, […]tiempo de callar y tiempo de hablar”. De hecho, también hay palabras adecuadas

que decir. “Una palabra a su tiempo apropiado, ¡oh, cuán buena es!”, indica un proverbio (Eclesiastés 3:1, 7; Proverbios 15:23). Por ello, determinemos cuál es el mejor momento de dar nuestra opinión o exponer lo que nos preocupa. Preguntémonos: “¿Está mi cónyuge cansado, o se encuentra relajado y fresco? ¿Puede provocar una discusión el tema

que quiero plantear? ¿Qué le molestó de mi manera de exponer este asunto la última vez que lo tratamos?”.

Es conveniente recordar que las personas reaccionan mejor cuando perciben cómo les beneficiará a ellas colaborar con la petición o acceder a ella. Si hay tensión entre los esposos, uno de ellos pudiera sentirse tentado de decir: “Hay algo que me molesta, así que vamos a aclararlo ahora mismo”. Es verdad que la manera exacta de expresarse dependerá de las circunstancias, pero sería mejor decir algo así: “Cariño, he estado pensando en lo que hablamos antes y en cómo arreglar las cosas”. ¿Qué manera de abordar el asunto es más probable que agradezca nuestro cónyuge?

En efecto, es muy importante cómo se dicen las cosas. El apóstol Pablo escribió: “Que su habla siempre sea con gracia, sazonada con sal”

(Colosenses 4:6). Procuremos que el tono de voz y las palabras que usamos sean con gracia. Tengamos en cuenta que “los dichos agradables son un panal de miel, dulces al alma y una curación a los huesos” (Proverbios 16:24).

En el caso de algunos matrimonios, colaborar en algunas tareas de la casa propicia un buen ambiente para la comunicación. Tal cooperación fomenta la sensación de estar compenetrados, a la vez que proporciona

el tiempo para tener conversaciones edificantes. En el caso de otros matrimonios, es mejor y favorece más la comunicación constructiva estar juntos tranquilamente sin hacer nada.

Normalmente se aprende mucho observando cómo se comunican las parejas compatibles. ¿Qué ha contribuido a que sean así? Es muy probable que su armonía y la facilidad con que se comunican sean la consecuencia de su esfuerzo personal, paciencia y consideración amorosa. Ellos mismos tuvieron mucho que aprender, pues no se consigue un buen matrimonio por casualidad. Es muy importante tomar en consideración la opinión del cónyuge, percibir sus necesidades y distender con una palabra prudente las situaciones que puedan causar

tensión (Proverbios 16:23). Por tanto, si estamos casados, hagamos lo posible por lograr que sea agradable vivir con nosotros y que sea fácil pedirnos disculpas. Eso contribuirá mucho a que tengamos un buen matrimonio.

Dios desea que las personas disfruten de matrimonios felices y duraderos (Génesis 2:18, 21). Pero la clave la tienen quienes se casan. Son necesarias dos personas amorosas que dominen el arte de la comunicación constructiva para conseguir un matrimonio feliz.

La comunicación constructiva contribuye a unir los corazones en un amor duradero

Internet desplaza a la TV

“La Generación Interactiva en España. Niños y adolescentes ante las pantallas”.

Firmado por Cristina Abad (Fuente Aceprensa)

2 Diciembre 2009

Según el informe, Internet supera ya a otras pantallas en las preferencias de niños y jóvenes en España. El 88% de los adolescentes y casi el 71% de los niños son usuarios de Internet, mientras que la penetración del móvil muestra mayores diferencias por edad: el 29% de los niños declara usar un móvil propio, pero el porcentaje se eleva al 83% en el caso de los adolescentes, siendo prácticamente del 100% a partir de los 17 años.

En cuanto al tiempo dedicado a cada pantalla, lo más habitual es que se sitúe entre una y dos horas los días lectivos y se incremente los fines de semana, cuando más de un tercio de los chicos supera las dos horas, el 34% en el caso de la televisión y el 34,5% en el de Internet.

Los contenidos más visitados por los adolescentes (música, deportes y juegos) son también la temática más frecuente de sus propias páginas web y blogs

El análisis se ha realizado a partir de 13.000 encuestas a menores de 6 a 18 años, pertenecientes a colegios públicos y privados de distintas comunidades autónomas, entre los meses de marzo y junio de 2009. Su objetivo es reconocer las oportunidades y los riesgos que ofrecen las TIC y concienciar, educar y sensibilizar sobre el uso sano de las pantallas (Internet, ordenadores, móviles, televisión y videojuegos).

Los resultados del estudio presentan una generación autónoma y autodidacta, “movilizada“, multitarea, creativa y precoz en el uso de las nuevas tecnologías. Estos adolescentes aprovechan al máximo las pantallas para comunicarse, conocer, compartir, divertirse y, en menor medida, consumir, y viven en ciberhogares, es decir, entornos equipados, conectados. La gran mayoría navega desde casa (el 89% de adolescentes y el 87,2% de los niños).

El 95% de los niños y el 97% de los adolescentes declara que en su casa hay un PC mientras que, antes de cumplir los diez años, el 59% tiene o usa un teléfono móvil y el 71% afirma tener conexión a Internet, porcentaje que se eleva al 82% en el caso de los adolescentes.

 El Messenger, servicio favorito

El acceso a la Red se convierte además en un vínculo entre los miembros de la “Generación Interactiva”, en un rasgo de identidad, en el que las posibilidades de comunicación marcan la diferencia. El Messenger encabeza la lista de servicios favoritos, seguido del correo electrónico.

Más de dos tercios de los menores afirman utilizar las redes sociales y casi el 40% de los menores internautas poseen página web propia o han generado alguna vez contenidos en la Red. Este perfil creativo aumenta con la edad, y a partir de los 16 años la mitad de los jóvenes construyen o administran sus propios blogs o páginas web. Los contenidos más visitados –música, deportes y juegos– son también la temática más frecuente de sus propias páginas web y blogs.

La autonomía frente a las pantallas es otro rasgo diferenciador de esta generación. El 64,9% de los niños utilizan los videojuegos sin compañía, frente al 76,2% de los adolescentes. En el caso de Internet, el 61% de los niños navegan solos mientras que el porcentaje aumenta hasta el 85,5% entre los adolescentes.

Respecto a su perfil como generación “movilizada”, lo más frecuente es que obtengan el primer móvil entre los 10 y los 12 años. Cabe destacar, además, que la utilidad del teléfono móvil evoluciona con la edad y mientras que los más pequeños lo utilizan básicamente para hablar y jugar, los adolescentes incluyen además nuevos usos como escuchar música, ver y hacer fotos y videos, entre otros.

Por su parte, la televisión sigue siendo una de las pantallas más presentes en los hogares. De hecho, en el hogar del 48% de los niños y del 56,5% de los adolescentes hay tres o más televisores. Frente al televisor se sitúan como una generación multitarea, es decir, para ellos es un medio de acompañamiento compatible con otras actividades.

 

Matrimonio duradero y familia

 

Informes demuestran que el matrimonio duradero es la familia

Fuente: The Family Watch y Aceprensa
Los padres casados y sus hijos están, por término medio, en mejor situación que las familias que han experimentado un divorcio, las parejas de hecho y los hogares monoparentales. Tienen mejor salud, menos pobreza y tasas más bajas de alcoholismo y otras adicciones; los chicos presentan menores índices de fracaso escolar y delincuencia juvenil, así como menor frecuencia de relaciones sexuales precoces y embarazos no deseados; en sus hogares hay menos violencia doméstica. Estas son algunas de las principales conclusiones de un informe elaborado por The Family Watch, que se presentó el 5 de noviembre en Madrid.

The Family Watch es un think tank que promueve estudios sobre la familia. Su objetivo es aportar conocimientos que sirvan de base para el diseño de políticas familiares adecuadas. Es una iniciativa de la International Federation for Family Development, que reúne organizaciones dedicadas a la orientación familiar en más de 50 países y tiene estatuto consultivo en el Comité Económico y Social de la ONU.

Que la familia estable y basada en el matrimonio resulte ser, por regla general, la mejor fórmula de convivencia doméstica no excluye –advierte el informe– que presente casos disfuncionales ni que a veces se dé el éxito con otras soluciones. Pero su superior rendimiento medio justifica que reciba un apoyo preferente en las políticas públicas, como en los demás campos se favorece lo que más beneficios reporta a la comunidad, en particular a largo plazo.

En efecto, un criterio clave para las prácticas y los planes socioeconómicos es la sostenibilidad. Tomando este concepto, The Family Watch define la “familia sostenible” como la que mejor asegura el bienestar de sus miembros sin poner en peligro el de la sociedad en general y el de las futuras generaciones. La unión matrimonial estable cumple esas condiciones, según el informe.

La tesis se apoya en seis estudios que son las principales fuentes y referencias a otro centenar largo, casi todos de las dos últimas décadas. Resultan particularmente elocuentes los datos que muestran las repercusiones de la estabilidad familiar en el entorno y en el futuro. Por ejemplo, índices más bajos de alcoholismo y drogadicción entre los miembros de los hogares estables suponen una descarga para los servicios sociales. Lo mismo vale en relación con la inferior tasa de pobreza absoluta y relativa (el divorcio y la monoparentalidad son importantes causas de la “feminización de la pobreza”), y con la menor incidencia de delincuencia juvenil. También, los casados contribuyen más a la productividad en la siguiente generación porque sus hijos adquieren un nivel de formación superior por término medio.

El informe comienza con las estadísticas de bodas y de rupturas matrimoniales en España en el último decenio (1999-2008). Resulta que la nupcialidad ha bajado un 20% y la divorcialidad ha subido un 380%. Un estudio británico, utilizado por The Family Watch para elaborar su informe, estima cuánto cuestan en total a aquel país las rupturas conyugales: el equivalente de 22.000 a 26.600 millones de euros al año, o 750-900 euros por contribuyente. Los subsidios públicos necesarios para mantener a una familia monoparental oscilan entre 4.400 y 16.600 euros anuales.

Entre otras cosas para aliviar la factura social de la desintegración familiar, el informe hace tres propuestas:

1) “Diseñar las políticas familiares a partir de los datos que proporcionan la psicología, la medicina, la sociología, la economía, etc.”, para “desideologizar” el debate sobre políticas familiares en busca del consenso más ampliamente posible.

2) “Poner en marcha medidas para prevenir las crisis familiares”, como el refuerzo de los servicios de mediación.

3) “Revisar el marco legal del matrimonio civil en España”, con objeto de favorecer la estabilidad.

Se trata en definitiva, dice The Family Watch, de concentrarse en fomentar “lo que funciona”, que a la vez resulta ser, según las encuestas, el ideal de la mayoría.

 

La familia estable, la mejor medicina

09/04/2012 – Familia
Si quieres tener un futuro mejor y no caer en depresión, lo

mejor es una familia estable

Un informe del Gobierno británico y otro de un grupo de científicos finlandeses muestran los beneficios del matrimonio y la familia. La estabilidad de los padres es un factor clave para la de los hijos y un buen antidepresivo

ForumLibertas.com

La estabilidad en el matrimonio es un factor clave que determinará mejores oportunidades y perspectivas laborales en el futuro de los hijos; y vivir en familia reduce las posibilidades caer en estados de depresión. Son dos conclusiones de dos estudios elaborados, respectivamente, en Reino Unido y Finlandia.

Matrimonio estable, hijos estables

El pasado 13 de marzo, el ministro de Trabajo y Pensiones británico, Ian Duncan Smith, presentaba un estudio encargado por su departamento en el que se venía a constatar que los matrimonios estables son la mejor opción y garantía de la propia estabilidad de los hijos.

Así, los hijos de matrimonios que mantienen su compromiso en el tiempo tienen más y mejores perspectivas y oportunidades laborales que los que tienen una única referencia parental.

El Gobierno británico lleva meses investigando y ha llegado a la conclusión de que el matrimonio es lo más favorable para los niños. Por ello, el ministro declarará en Parlamento en favor de las uniones matrimoniales,.

Según informa The Telegraph, el principal argumento del ministro de Trabajo será que los menores criados en hogares familiares, tienen más probabilidades de conseguir una buena educación y un buen

trabajo.

La iniciativa viene motivada por una campaña del ministerio de Trabajo que pretende convencer al sector privado de que invierta en la educación de niños con desventajas

sociales.

Las primeras investigaciones que dan origen al estudio concluyen que la estabilidad en la relación de los padres es un factor clave en el futuro de los hijos.

El estudio realizado por el Gobierno destaca que las parejas casadas se separan menos que las que sólo viven juntas, por lo que el matrimonio es especialmente bueno para los niños. Es por eso que el Gobierno expresará su preocupación por la tendencia a la baja del número de matrimonios.

Según reflejan los datos del ministerio de Trabajo, una de cada tres parejas que viven juntas sin casarse se separan antes de que su hijo cumpla los 5 años. En contraste, entre las parejas casadas sólo se separan una de cada diez.

Duncan considera que las sociedades modernas en su conjunto han hecho muy poco para apoyar a las familias y que esa será precisamente su estrategia para lograr el triunfo de los matrimonios.

“Los niños disfrutan de mejores resultados en sus vidas cuando los padres les

apoyan y protegen”, argumenta el ministro de Trabajo. Por el contrario, como reflejan los resultados delestudio, los hijos que han vivido el deterioro de la relación de sus padres son más propensos a desarrollarse peor a nivel “cognitivo”

y por lo general sus salidas laborales son menos favorables. Quedarse juntos es mejor para los niños, es la conclusión principal del estudio.

Si vives en familia tendrás menos depresiones

Por otra parten un estudio llevado a cabo en Finlandia revela que la gente que vive sola compra un 80% más de depresivos que los que

viven con familiares y amigos, por lo que el informe concluye que vivir en familia reduce el riesgo de caer en depresión.

El estudio ha sido elaborado por un grupo de científicos finlandeses que realizaron la investigación entre 2000 y 2008, cuando analizaron los casos de 3.500 personas que estaban utilizando antidepresivos. Los resultados mostraron que las personas que vivían solas consumieron en esos 8 años un 80% más de antidepresivos que las que vivían en familia o con amigos.

Según informa Teinteresa.es, Covadonga Cháves, integrante de la Sociedad Española de Psicología Positiva, confirma que estos casos se ven “todos los días” en las clínicas. “El apoyo social, el tener a alguien con quien descargarse es fundamental, pues se puede influir en el cerebro con los actos y la conducta más que con los fármacos”, señala la especialista.

Por su parte, el vocal del Colegio de Psicólogos Oficial de Madrid, Vicente Prieto, explica que “la persona que tiende a aislarse, que no tiene una red social amplia,

puede ir desarrollando una tendencia a tener altibajos emocionales”.

Si bien el psicólogo ha advertido que no puede establecerse una relación directa entre el hecho de vivir solo y la depresión, si reiteró que el hecho de tener una escasa “red social” y no tener “apoyo familiar cercano” hace que los problemas se agraven.

Más problemas mentales si vives solo

Por su parte, la doctora Laura Pulkki-Raback, que estuvo a cargo de la investigación

desarrollada en el Instituto Finlandés de Salud Ocupacional, aseguró que el riesgo real de sufrir problemas mentales para la gente que vive sola podría ser incluso mayor del difundido en el informe.

“Este tipo de estudio por lo general subestima algunos riesgos, ya que la gente más propensa a sufrir problemas mentales son los que menos se prestan a que se les haga seguimiento. Tampoco fuimos capaces de averiguar cuán comunes eran las depresiones no tratadas”, explicó la investigadora.

Según los expertos, el hecho de vivir con familia o

amigos ayuda a que la gente pueda exteriorizar cómo se siente y hablar cotidianamente de los problemas

que padecen, algo que colabora en la recuperación. Mientras que aquellos que viven solos padecen una falta de integración social y una pérdida de confianza, dos factores fundamentales para preservar la salud mental.

Beth Murphy, directora de información de la organización británica Mind, explicó que “la gente que vive sola” debería recibir tratamientos complementarios, “como sesiones con terapeutas, que son entornos seguros para discutir sobre los problemas”. “No se puede hacer que dependan tan solo de los antidepresivos”, remarcó.

En la misma línea, Prieto ha señalado que una de las características del proceso depresivo es que la persona que lo padece se desconecta de los estímulos externos, así como de las amistades, la familia y los compañeros de trabajo

Ideología de género

Ideología de género como herramienta de poder

Entrevista con Jorge Scala

MADRID, 1 febrero 2012 (ZENIT.org).- El libro titulado La ideología de género, del abogado provida argentino Jorge Scala acaba de ser publicado en portugués y lanzado en Brasil en octubre pasado. En España ha sido publicado por la editorial Sekotia, con el subtítulo “el género como herramienta de poder”.

ZENIT ha entrevistado a Jorge Scala, profesor de bioética en la Universidad Libre Internacional de las Américas, para que explique el significado de su libro y las omplicaciones de esta ideología en nuestra sociedad.

¿Porqué un libro sobre la ideología del género?

–Jorge Scala: La razón es sencilla: la ONU ha creado una Agencia de género. Esa agencia se dedica a controlar que todos los organismos y programas de la ONU incluyan el género. A su vez, la Unión Europea y el Banco Mundial condicionan los préstamos para el desarrollo de los países pobres, a cláusulas de difusión del género. Finalmente, se ha incorporado el géneroen el sistema educativo de nuestros países. Ante todo esto, es preciso investigar qué cosa es el género.

¿Qué significa decir que la ideología del género es esto, una ideología y no una teoría o un descubrimiento científico?

–Jorge Scala: Una teoría es una hipótesis verificada experimentalmente. Una ideología es un cuerpo de ideas cerrado, que parte de un presupuesto básico falso –que por ello debe imponerse evitando todo análisis racional–, y luego va desplegando las consecuencias lógicas de ese principio falso. Las ideologías se imponen utilizando el sistema educativo formal (escuela y universidad) y no formal (medios de propaganda), tal como hicieron los nazis y los marxistas.

¿Qué es, por lo tanto, la ideología del género? ¿Cómo la definiría para nuestros lectores?

–Jorge Scala:Su presupuesto básico falso es este: el sexo sería el aspecto biológico del ser humano, y el génerosería la construcción social o cultural del sexo. Es decir que cada quien sería absolutamente libre –sin condicionamiento alguno, ni siquiera el biológico–, para determinar su propio género, dándole el contenido que quiera y variando de génerocuantas veces se le ocurra.

Ahora bien, si esto fuera verdad, no habría diferencias entre varón y mujer –salvo las biológicas-; cualquier tipo de unión entre los sexos sería buena social y moralmente, y todas serían matrimonio; cada tipo de matrimonio daría origen a un nuevo tipo de familia; el aborto sería un derecho humano irrenunciable de la mujer, ya que solo ella queda embarazada, etc. Todo esto es tan absurdo, que sólo se puede imponer con una suerte de “lavado de cerebro” global.

Usted, en su libro, la llama de Ideología totalitaria. ¿Hay relación con las ideologías totalitarias que la humanidad ha experimentado en la historia? ¿O es un paso para llegar a estas situaciones de políticas totalitarias?

–Jorge Scala:El génerodestruye la estructura antropológica íntima del ser humano, por lo tanto quien quede a merced de esa ideología lo hará “voluntariamente”. No es más que una herramienta de poder global que, de imponerse, llevará a un régimen totalitario –aún cuando haya elecciones y partidos políticos como en la Alemania nazi–. En cambio, en las otras ideologías conocidas, el Estado dominaba –o domina como en Corea del Norte o Cuba- por la fuerza bruta.

Parece una ideología que entra en los países por el aspecto legal y jurisdiccional. ¿No será la falta del reconocimiento de una ley natural, y la adopción de positivismo, los fundamentos de este totalitarismo?

–Jorge Scala: El problema parece más profundo y complejo. El ethos es aquello por lo que un pueblo estima lo que está bien o lo que está mal, desde lo más profundo de su corazón, al margen de lo que digan las leyes e incluso de lo que haga cada quien en su propia vida. El problema es que Occidente ha perdido su ethos común que, hasta hace 30 o 40 años, era el Cristianismo. El liberalismo hizo que mucha gente considere que la moral es una cuestión privada de cada persona. Entonces, para algunos es bueno mentir, robar, matar o fornicar –en determinadas circunstancias– ; y como todas las opiniones valen lo mismo, la única manera de vivir en sociedad es que las leyes “impongan” un cierto ethos, que debe ser aceptado por todos, bajo ciertas penalidades. Por eso en nuestros parlamentos se fomenta todo tipo de leyes de género. Se busca con ellas que –junto con la educación-, formen el nuevo ethos de nuestros pueblos. Y si el génerose convierte en ethos, el sistema totalitario funcionará a pleno.

La teoría del género es totalitaria, pero no vemos a nadie perdiendo la vida. ¿Por qué, entonces temer algo que no pasa de leyes y de ideas? No debemos respetar la opinión de cada uno?

–Jorge Scala: El año 2010 España reformó su ley de aborto conforme la ideología de género, considerándolo un “derecho humano” esencial de la mujer. Ese año hubo 113.031 abortos en España. Esa “ley” y esa “idea” mataron –solo en España y solo ese año- a tanta gente. No hay que temer a la ideología de género,sino enfrentarla en el campo de las ideas, que es donde se la puede vencer más fácilmente.

Hay que respetar a las personas –cualesquiera sean sus pensamientos-. En cambio, las opiniones no se respetan: se disciernen. Y luego de estudiarlas, se apoyan o se desechan. El libro ayudará al lector a efectuar su propio discernimiento en torno al género.

¿Cuáles son, entonces, las consecuencias para nuestros hijos, para la próxima generación?

–Jorge Scala: Respondo con un hecho real. Me tocó dar una conferencia sobre esta ideología, a todos los docentes de una ciudad de 7.000 habitantes, en una zona rural de mi provincia. Gente sencilla y de trabajo. Al concluir, una maestra comentó en voz alta: -Ahora entiendo porqué hace unos días mi hijo de 7 años me preguntó: Mamá ¿yo son nene o nena?… Las personas formadas y maduras son inmunes a esta ideología, pero si dejamos que se la metan a los niños desde su más tierna infancia –cine, TV, escuela, radio, revistas–, en no pocos casos habrá que lamentar con el tiempo tragedias de todo tipo.

“Donde haya un hombre –mujer o varón-, su inteligencia buscará la verdad, su voluntad intentará amar y autodirigirse hacia el bien”, es lo que usted afirma en su libro. ¿Cuál sería el mejor modo de contrarrestar esta y otras ideologías parecidas que tienden a penetrar en las constituciones y leyes de los países, es la formación de varones y mujeres verdaderos? ¿Qué significa un varón o una mujer verdadera?

–Jorge Scala:Frente a todas las ideas absurdas o malsanas que campean en nuestro mundo actual, lo más importante no son otras ideas que las enfrenten; sino más bien testigos de la verdad. Mujeres y varones cabales, de carne y hueso. La mujer es la madre, o sea: el amor incondicional y que siempre está presente. El varón es el padre, o sea: la autoridad, el amor que pone límites y condiciones, para sacar lo mejor de sí a cada quien. Ambos amores son necesarios para llegar a la madurez humana. Conocer unvarón y una mujer así, es la mejor “vacuna” contra la ideología de género.

Por Thácio Siqueira

Se puede conseguir el libro en este enlace: http://www.sekotia.com/libros/libro-ideologia-de- genero.htm.

Defender los valores

Defender los valores, no acobardarse

“Tiempos recios” llamaba Santa Teresa de Jesús a los de su época, la del siglo XVI. Pero en esos tiempos se forjaron los mejores santos de la historia de España. Hoy también vivimos tiempos recios. Los acontecimientos se suceden a ritmo vertiginoso. No nos da tiempo a recibir una noticia cuando tenemos otra encima, peor que la anterior. Realmente, vivimos tiempos recios en el campo de la fe.

Imágenes blasfemas contra la Virgen y contra Jesucristo, que ofenden a Dios hiriendo lo más profundo de la sensibilidad cristiana, realizadas con esa intención expresa. Colaboración institucional en un suicido, que se presenta como muerte digna, desconectando el respirador y ampliando la noticia por todos los medios, abriendo camino a la eutanasia. Excarcelación de un criminal para obtener una rentabilidad política, sin arrepentimiento por su parte y con humillación para las víctimas. Las trabas de todo tipo a la enseñanza de la religión en la escuela, cuando la piden el 80 % de los padres en toda España (más del 82 %, en nuestra diócesis de Tarazona). La implantación de la asignatura Educación para la Ciudadanía, a través de la cual adoctrinar a nuestros niños y jóvenes sobre la ideología de género, en contra del parecer de sus padres. La desaparición del verdadero matrimonio del ordenamiento jurídico, con la unión de personas del mismo sexo y el divorcio exprés, etc. etc. Y lo que venga.

Son muchas cosas a la vez y ninguna sucede por causalidad o como un hecho aislado, sino que están relacionadas unas con otras. Se trata de imponer a la fuerza el Estado laicista, confesionalmente ateo. Se trata de borrar del mapa a Dios y a quien lo represente. Estamos asistiendo a una persecución declarada contra la religión y contra la Iglesia católica, que desborda las fronteras de nuestra patria, pero que ha encontrado en España un fuerte punto de apoyo. Una persecución con guante blanco, de manera que no se note y nadie pueda reaccionar. Pero en esta situación Dios quiere sacar bienes para nosotros, Dios quiere forjar grandes santos, si tenemos fe.

Se acusa a la Iglesia de trasnochada. Se la presenta como una institución obsoleta y pasada de moda, que sólo pretende mantener privilegios del pasado. Se rechaza frontalmente toda moral que venga dada al hombre o por su naturaleza humana o por la revelación de Dios. “Aquí no hay más ley ni más moral que la del Parlamento”, me decía un alto cargo político. “Será para Vd., que vive de eso. Yo vivo de la ley de Dios”, le respondí. “Y hay que obedecer a Dios antes que a los hombres”, como declaró san Pedro ante los tribunales (Hech 5,29).

Tiempos recios, que nos invitan a reforzar nuestra fe, acercándonos más a Dios, y a demostrar esa fe en un testimonio de amor a los demás. En esta barca tan zarandeada por las olas, va Jesucristo con nosotros, que nos invita a echar de nuevo las redes y a no perder la confianza en su victoria. La Iglesia no tiene que imitar las formas del mundo para cumplir su misión, sino sacar de su entraña los mejores jugos maternales con los que alimentar al hombre de hoy, sediento de verdad y de justicia. Estos tiempos recios nos llevarán a una mayor autenticidad de nuestra fe.

Si no estamos dispuestos a perder nada, lo perderemos todo. Sólo sacaremos provecho de todo esto si estamos dispuestos al martirio, “a derramar nuestra sangre en la lucha contra el pecado” (Hbr 12,4). El cristianismo se ha difundido siempre con la valentía y la fortaleza de los mártires. Los mártires anuncian con fuego la verdad que nos salva, y están dispuestos a morir amando. El mártir sabe que nada ni nadie podrán separarnos del amor de Dios. Y eso es lo que siempre ha convencido.

Carta pastoral de Mons. Demetrio Fernández González, Obispo de Tarazona (marzo 07)

 

Hasta dónde controlar las redes sociales de mi hijo

¿Hasta dónde debo controlar lo que mi hijo

hace en las redes sociales?

David Pulido

Son muchos los padres que nos preguntan en consulta acerca del uso que sus hijos adolescentes hacen de las redes sociales. Asumido ya que internet es la vía más frecuente de comunicación entre los adolescentes, los padres se preguntan cuál debe ser el papel que ellos desempeñen. ¿Deben imponer algún tipo de vigilancia sobre sus relaciones sociales en el mundo virtual o deben darles total autonomía?

La pregunta es tramposa como casi siempre que planteamos las cosas en términos de todo o nada. Tratar de controlar cada interacción que se produzca en la red, llegando incluso a prohibir una actividad tan popular, sólo consigue crear conflictos y que no hagan suya la norma: acabarán abriéndose otro perfil secreto o modulando la privacidad para que no puedan ser controlados.

La clave es entender el espacio virtual como un espacio real de interacción entre

los adolescentes

También perderemos una oportunidad de ayudar a nuestro hijo en su proceso de socialización, puesto que un buen uso de las redes es positivo para que el adolescente adquiera habilidades sociales, desarrolle aficiones y consolide su grupo de amigos. El prohibir y el espiar no permitirá que ese control sea una ayuda para nuestro

hijo. Recordemos que para el adolescente es vital sentirse con la confianza de los padres a la hora de ir estableciendo su propio entorno.

¿Una sociedad sin adultos?

La opción de dejarles totalmente a su aire, sin esa guía, tampoco es adecuada. No saber quiénes son los amigos de nuestros hijos, qué hacen, qué les preocupa, nos distancia de ellos. Y sin estar pendientes de su vida virtual hoy en día no podemos conocer su vida social ni quién es nuestro hijo. Las redes sociales no pueden ser como la isla de la novela de Golding El señor de las moscas, una sociedad sin adultos, con adolescentes imponiendo sus propias normas sobre otros. En las redes sociales donde sólo entran menores, la gramática no existe, las relaciones son muy superficiales y las interacciones en muchos casos son inadecuadas. Sin poner límites, sin ser referencia para ellos, tampoco les ayudamos a crecer.

¿Cómo deben entonces ejercer control los padres sobre un mundo que hace diez años no existía y donde los hijos les dan mil vueltas?

La clave es entender el espacio virtual como un espacio real de interacción entre los adolescentes. Imaginando que cada vez que se conectan lo que están haciendo es abriendo su habitación para que su grupo de amigos entre a pasar el rato, a hablar, a ponerse música y a compartir experiencias.

Tienen que saber que la confianza se gana y que si son responsables tendrán

más autonomía

Con esta comparación es mucho más fácil guiarnos por el sentido común a la hora de pautar sus relaciones. Así, por ejemplo, si no dejamos que nuestros hijos queden con sus amigos a la una de la mañana, no debemos dejar que usen las redes sociales de madrugada. Si cuando salen no les espiamos pero demandamos saber con quiénes van ¿por qué no saber quiénes son los contactos que tienen en sus perfiles?

Pautas de actuación

Obviamente, el mundo virtual no tiene las mismas condiciones que las conductas sociales reales: la inmediatez de respuesta, la multidifusión y permanencia en internet de sus interacciones y, sobre todo, la enorme accesibilidad que tienen desde cualquier parte a través del móvil a esa “habitación”, supone nuevas dificultades a la hora de poder controlar, pero si partimos de este símil podemos aplicar las mismas pautas que en el resto de sus relaciones.

– ¿Qué debo ver y qué no de su muro? La privacidad depende de la edad del adolescente. Así como entendemos que con un chaval de dieciocho años no debemos estar presentes en sus conversaciones en el entorno real, no podemos pedirles que nos lean sus muros o sus mensajes en la red, pero sí preguntar quiénes son sus contactos o su actividad más general. En cambio, si tiene catorce, al igual que entramos de vez en cuando en el cuarto a ver qué hace, también podemos entrar con ellos en su perfil o preguntarles con más detalle. Deben entender que la confianza se gana y que además de la edad será la responsabilidad de sus acciones pasadas las que determinen que tengan mayor o menor autonomía. En situaciones de riesgo, tener total acceso a su perfil puede ser vital para solucionar un problema complicado.

– ¿Cuándo deben usarlo? Hay que poner horarios y restricciones al uso de las redes sociales, no cayendo en la trampa de que «sólo es un segundo» o que lo hacen desde el mismo móvil. Las redes sociales no deben usarse en tiempos destinados al estudio o al descanso. Tampoco si estamos estableciendo comunicación con ellos o están en algún momento de reunión familiar, como las comidas. Hay que enseñarles que durante una actividad social en el mundo real no se debe estar usando a la vez las redes sociales, que siempre será de menor enriquecimiento para el menor.

– ¿Cómo debo ver su perfil? Depende, de nuevo, de la edad del menor y de la relación previa que tengamos con él. Hacerse un perfil propio y ser contacto de nuestros hijos es muy útil, sobre todo si el adolescente nos invita voluntariamente, como cada vez es más habitual en redes sociales donde adultos y adolescentes coexisten. Otra forma es entrar con ellos directamente, sentándonos a su lado mientras las usan como hacemos cuando decidimos participar de alguna actividad de nuestro hijo y sus amigos. Otra vía útil es pedirles ver fotos o vídeos que quieran enseñarnos y aprovechar para hacer alguna pregunta concreta que queramos saber.

– ¿Qué debo comentar del uso que hacen? Igual que en la vida real debemos intervenir preguntando, corrigiendo o reforzando aquello que nos gusta que digan y hagan. Con mano izquierda y sin emitir juicios, podemos comentar qué nos han parecido algunas cosas que hemos leído o recomendar y compartir otras con ellos.

Nunca podemos dejar de estar pendientes, de hablar con nuestros hijos, de conocerlos… Estamos en la era de la revolución de la comunicación, no perdamos la más importante de todas ellas en los albores del mundo virtual: la que debemos tener con nuestros hijos

Graves problemas de la fecundación in vitro

Problemas graves de la fecundacion in vitro

Los octillizos nacidos en Estados Unidos plantean preguntas

Preocupación por el uso de la fecundación artificial

ROMA, domingo, 1 marzo 2009 (ZENIT.org).- Las últimas noticias sobre el nacimiento de octillizos de Nadya Suleman han hecho que aumente la preocupación sobre cómo se está utilizando la fecundación in vitro.

El 26 de enero, Suleman, que es soltera, desempleada y ya tiene 6 hijos, dio a luz 6 niños y 2 niñas, informaba el 4 de febrero el Washington Post. La noticia, observaba el artículo, ha causado amplia preocupación por la falta de regulación de las clínicas de fecundación in vitro.

«Tienes un mercado prácticamente sin regular con una ley equivocada que hace las veces de regulación en Estados Unidos», declaraba al Washington Post David C. Magnus, director del Centro Stanford para la Ética Biomédica.

Casi un tercio de los nacimientos por fecundación in vitro en Estados Unidos dan como resultado gemelos o más, informaba el 12 de febrero el New York Times. De hecho, a diferencia de otros muchos países, en Estados Unidos no existen límites sobre cuántos embriones pueden implantar las clínicas de fecundación in vitro.

El New York Times citaba datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades que revelan que, en 1996, hubo 64.681 procedimientos de fecundación in vitro, llevados a cabo en 330 clínicas. Según la última información disponible – no se daban fechas en el artículo – el número de procedimientos ha aumentado hasta los 134.260 en más de 483 clínicas a lo largo del país. En total, cada año nacen en Estados Unidos más de 50.000 niños como resultado de estos procedimientos.

El nacimiento de octillizos es un ejemplo del uso irresponsable de la tecnología reproductiva, afirmaba Scott B. Rae, miembro del Center for Bioethics and Human Dignity, en un comentario el 13 de febrero en la página web de la organización. Tales procedimientos ponen en peligro tanto la salud de la madre como la de los hijos, comentaba.

Peligros genéticos

Los nacimientos múltiples no son ni mucho menos el único tema asociado con la fecundación in vitro. Poco después del asunto de los octillizos, el New York Times publicaba el 17 de febrero un largo artículo sobre los riesgos genéticos implicados en la utilización de la fecundación in vitro.

Los investigadores cada vez están más preocupados por los cambios que pueden tener lugar en los embriones que crecen fuera de la matriz durante varios días antes de ser implantados. El artículo observaba que algunos estudios han descubierto que puede haber un desarrollo génico anormal y un aumento de desórdenes genéticos debido a la fecundación in vitro.

El artículo citaba un estudio publicado el pasado noviembre por los Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades que descubrieron un aumento de algunos defectos de nacimiento en bebés concebidos por fecundación in vitro.

El New York Times añadía que los descubrimientos son preliminares; no obstante, el artículo citaba la preocupación de los expertos en este campo: «Hay un consenso creciente en la comunidad clínica de que existen riesgos», declaraba al New York Times Richard M. Schultz, decano de ciencias naturales en la Universidad de Pennsylnavia.

Otros estudios también revelan preocupación por las consecuencias de la fecundación in vitro. Los niños nacidos a través de ella pueden ser más propensos a la agresión y a problemas de conducta en la adolescencia, informaba el periódico Australian el 21 de octubre.

Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Cambridge y presentado en una conferencia sobre fertilidad en Brisbane, Australia, comparaba a 26 niños concebidos por fecundación in vitro con 38  que fueron adoptados y 63 que fueron concebidos naturalmente. En los niños concebidos por fecundación in vitro se observó una pequeña diferencia en cuanto a problemas de conducta.

Al día siguiente, el periódico Australian publicaba otro artículo sobre el tema, informando que las madres de niños in vitro sufrían mayores dificultades para hacer frente a las exigencias de la maternidad.

Un estudio patrocinado por el Australian Research Council, IVF Australia y Melbourne IVF, encontró que las mujeres que concebían de esta forma son más propensas que las demás a tener problemas postparto.

En Inglaterra, un reportaje en el periódico Telegraph el 30 de julio afirmaba que los niños concebidos in vitro son más propensos a nacer prematuramente y pesar menos al nacer.

Un equipo de investigación encabezado por Liv Bente Romundstad, de la Universidad noruega de Ciencia y Tecnología de Trondheim, examinó a más de 2.500 mujeres que habían concebido tanto naturalmente como a través de fecundación in vitro y compararon los resultados con más de 1 millones de concepciones naturales.

Los resultados demostraron que los bebés concebidos in vitro eran un 31% más propensos a morir en el periodo anterior y posterior al nacimiento. De media, nacían dos días antes y eran un 26% más pequeños para su edad.

Sin límites

Otro motivo de preocupación es cómo los bebés concebidos in vitro son utilizados como objetos para satisfacer las exigencias de sus padres. Un reportaje el 30 de diciembre en el Telegraph contaba que una mujer india de 70 años que había dado a luz una niña en noviembre ya estaba planeando tener un segundo hijo.

Rajo Devi, de 70 años, tuvo una niña, Naveen Lohan, el 28 de noviembre. Según parece ahora quiere un niño.

Rajo y su marido, Bala Ram, fueron a la Clínica de Fertilidad Nacional Hisar para un tratamiento después de oír que una mujer de sesenta años había dado a luz gemelos. Los óvulos donados por otra mujer fueron fecundados con el esperma de Bala e implantados en Rajo.

Otra fuente de preocupación es el hecho de que los niños acaben en estructuras familias convulsas, por decir un eufemismo. En Canadá, informaba el 29 de enero el National Post, un tribunal sentenció sobre una disputa que implicaba a una pareja lesbiana y a un hombre homosexual que fue el donante de esperma.

Según el artículo el tribunal dictaminó que el contrato de donación entre el hombre y la pareja era inquebrantable, abriendo así la posibilidad de que un niño tenga múltiples padres cuando hay donantes implicados.

La pareja y el hombre firmaron un contrato antes de que naciera el niño, que le daba algunos derechos como una especie de co-padre. Las disputas que vinieron después entre la pareja y el hombre dieron como resultado que se restringiera su acceso al niño, algo que la corte le ha devuelto ahora.

Luego vino la noticia a finales del año pasado de una mujer de 56 años que dio a luz a sus nietas trillizas, informaba el 11 de noviembre Associated Press. Jaci Dalenberg, de Ohio, accedió a ser la madre para su hija, Kim Coseno, y su marido, Joe.

Coseno tenía dos hijos de un matrimonio anterior pero era incapaz de tener otro hijo por causa de una histerectomía. Coseno podía aún producir óvulos, por lo que fueron fecundados con el esperma de su nuevo marido e implantados en su madre. Las niñas nacieron el 11 de octubre, con un adelanto de dos meses.

Dignidad humana

«A cada ser humano, desde la concepción hasta la muerte natural, se le debe reconocer la dignidad de persona», decía una instrucción de la Congregación para la Doctrina de la Fe el 8 de diciembre.

El documento trata de algunas cuestiones de bioética relacionadas con la vida humana.

«El ser humano debe ser respetado y tratado como persona desde el instante de su concepción y, por eso, a partir de ese mismo momento se le deben reconocer los derechos de la persona, principalmente el derecho inviolable de todo ser humano inocente a la vida», observaba la declaración en el número 4.

En cuanto a las técnicas de fertilidad asistida, el documento ha aclarado que no se rechazan porque sean artificiales. El uso de la medicina y de la ciencia no se rechaza, sino que es esencial evaluarlas de acuerdo a la dignidad de la persona humana.

La fecundación in vitro, observaba la Congregación para la Doctrina de la Fe, implica la destrucción de embriones. Además, la procreación se separa del acto conyugal del marido y de la mujer.

«La Iglesia reconoce la legitimidad del deseo de un hijo, y comprende los sufrimientos de los cónyuges afligidos por el problema de la infertilidad», admitía el documento.

Sin embargo, añadía, «el deseo de un hijo no puede justificar la ‘producción’ del mismo, así como el deseo de no tener un hijo ya concebido no puede justificar su abandono o destrucción».

En la actual crisis económica, el consumismo está cada vez más desacreditado, pero cuando se trata de la vida humana parece que el consumidor es el rey, en detrimento de la dignidad humana.

Por el padre John Flynn, L. C., traducción de Justo Amado